Tifariti se encuentra en los llamados “Territorios Liberados del Sáhara Occidental”. “Liberados” porque desde la guerra que enfrentó a Marruecos con el Frente Polisario, hace más de 20 años, esta zona está controlada por los saharauis. Se sitúa a unos 350 kilómetros al suroeste de los campamentos de refugiados de Tindouf, en Argelia, y fue la última población bombardeada por Marruecos durante la guerra. Es un centro de referencia para los más de 10.000 nómadas saharauis que se mueven por uno de los desiertos más duros e inhóspitos de la Tierra, donde la temperatura en verano supera los 50º, y casi nunca llueve.
Actualmente, desde el punto de vista sanitario, en toda esta zona, al igual que en el resto de los Territorios Liberados, sus dispensarios y hospitales se encuentran en muy malas condiciones en cuanto a recursos humanos y materiales. Esto se debe a que la cooperación internacional de ayuda al pueblo saharaui no llega hasta aquí, y se concentra en los campamentos de refugiados de Tindouf, principalmente por razones políticas para no soliviantar a Marruecos. En otras palabras, es una tierra política y mediáticamente olvidada.
En noviembre de 2013, la ONG Sáhara 4×4 Solidario, que colabora con la Media Luna Roja Saharaui aportando vehículos para trasportar material y equipamiento médico, instaló dos sillones dentales en el Hospital Navarra de Tifariti. Posteriormente, en abril de 2014, fue la ONG Dentalcoop la que acabó por equipar completamente esta clínica con instrumental y material médico. Las instalaciones cuentan con todo el equipamiento necesario para ofrecer una asistencia odontológica de calidad, incluyendo un equipo de rayos X, autoclave de esterilización, anestesia, material de empastes, etc. Se creó, así, la primera clínica dental del Sáhara Libre.
El equipo de Dentalcoop, formado por dentistas, auxiliares e higienistas, y el de Sáhara 4×4 Solidario, por mecánicos y amigos del pueblo saharaui, todos ellos voluntarios, pusieron rumbo a Argelia. Algunos ya veteranos, y otros nuevos en este terreno, aterrizaron con entusiasmo y energía para desempeñar el “trabajo” que tenían encomendado, en un territorio que para la mayoría de ellos era completamente desconocido, histórica y geográficamente.
La idea inicial del proyecto ha sido la de realizar campañas de dentistas voluntarios españoles en distintas zonas de los Territorios Liberados. Hasta diciembre de 2015, unos 30 voluntarios han viajado a Tifariti, e incluso hasta Miyek, al sur de esta región, a más de 800 km de los campamentos de Tindouf, en una zona donde nunca antes habían llegado cooperantes. En total se han atendido a unos 800 pacientes de diversas patologías. Muchos de ellos nunca habían sido tratados por un dentista, y mucho menos con anestesia.
Pero el proyecto de Dentalcoop no solo se ha centrado en la asistencia médica en el Sáhara Occidental. En colaboración con las autoridades saharauis, en concreto con el Departamento de Estomatología del Ministerio de Salud Pública saharaui, Dentalcoop inició en 2014 un programa de formación científica de los odontólogos saharauis. Estos dentistas reflejan la realidad de un pueblo que, a pesar de sus duras condiciones de vida, y con total dependencia de la ayuda internacional, luchan por salir adelante y mantener viva la esperanza de una solución política al conflicto saharaui. Porque no solo necesitan recursos, también quieren avanzar en su desarrollo y capacidades para ofrecer los mejores servicios y condiciones de vida al pueblo saharaui en su futuro Sáhara Libre.
En este “enseñar a pescar”, los voluntarios de Dentalcoop, dirigidos por el Dr. Ignacio Calatayud, odontólogo de Madrid con años de experiencia en África, han establecido una serie de actividades de formación médica para los facultativos saharauis, además de buscar financiación estable para sostener económicamente los sueldos de estos dentistas. Su realidad en este sentido se traduce en sueldos de 80€ al mes, que cobran trimestralmente, y en ocasiones con retrasos de varios meses. Esta situación obliga a estos profesionales, para sostener a sus familias, a recurrir al pluriempleo como taxistas, en comercios, e incluso dedicándose al pastoreo.
Además Dentalcoop está poniendo en marcha un Plan Integral de Salud Bucodental que buscará garantizar la mejor asistencia odontológica a la población saharaui, tanto en los campamentos de refugiados como en los Territorios Liberados.
Pero lo que realmente ha hecho este grupo de voluntarios ha sido, respondiendo a la hospitalidad saharaui, crear un vínculo personal. Un vínculo que ya existía, pero que estaba dormido. El de la amistad y las raíces culturales comunes que mantiene España con esos otros “españoles” de África, y que va a garantizar que el compromiso con su causa sea también un compromiso con la salud bucodental de todo el pueblo saharaui.